Año 2008
Este año del 2008 me toco ser patrono de San Gil por lista correlativa, me alegró el nombramiento de mayordomo y aparte de las obligaciones que me correspondía como tal distinción contribuí con este cuadro al óleo que medio pago de un pequeño donativo se sorteo el mismo día del Santo Patrón en la puerta de la Iglesia junto con una cesta surtida de suculentos manjares. Tengo que decir que no soy un beato acérrimo, no por eso deje de emocionarme cuando ayudé a bajar San Gil de su hornacina al pedestal del Altar Mayor, una vez el cura párroco hizo su plática sobre la vida del santo, termino con el grito tradicional cerverano, ¡VIVA SAN GIIIIIIIIIIIIILLL¡ dando fe de la voz del cura gritando con toda su potencia (me recordó el grito, pintura de Edvard Munch) respondiendo todos los feligreses al unísono correspondiente de ¡VIVAAAAAAAAA¡ que retumbó por toda la iglesia, y algunos cerveranos mostraron su rostro con lágrimas desprendidas del conducto lacrimal de sus ojos con amor a su santo y a sus recuerdos.
Las fiesta, para el pueblo ya estaban en su apogeo, la juventud ya rondaba con la gaita por la calle, en el ayuntamiento los niños se enharinaban unos con otros en una guerra bien entendida, los mayores tomaban su zurracapote gentileza de la corporación municipal y otros seguían a la charanga bailando las rastras por la carretera hasta el barrio de abajo, una fiesta alegre que todos los cerveranos cada año acogen con mucho cariño, tanto la de Santa Ana como la de San Gil
Las fiestas siempre son de regocijo, lo que pasa, es que uno cuando va cumpliendo años cuestan un poco más de asimilarlas y no es porque no le gusten a uno, es que es más difícil aguantar el trote de los demás que son más jóvenes, a pesar de todo que vengan fiestas que por lo menos intentan alegrar la vida.
Si relaciono fiesta con esto que nos viene encima de las elecciones municipales, autonómicas o estatales, podría sacar esta conclusión; en las campañas una vez terminadas, sólo bailan los representantes que ganan de cada partido y como bailan, cantan y comen, sin acordarse de que antes de ser votados nos prometían a todos nosotros, los participantes un panorama idílico, que bailaríamos, cantaríamos y comeríamos con ellos a tutiplén, resulta una vez visto el resultado, que bailarines, cantarines y cocineros se lo quedan para ellos para tenerlo a punto para otras elecciones y nosotros al paso del tiempo, los votantes, oiremos la misma sonata cantada por los mismos y volveremos a caer en el mismo festejo y volveremos a no estar en el convite, eso si, tu ayudaras a pagarlo para que ellos sigan bailando, cantando y comiendo. Yo ya me empiezo a cansarme tengo demasiados años y no puedo seguir este trote de siempre pagar y pagar y los demás cobrar. A pesar de la queja, que es real, por muchas cosa que uno percibe, pienso que sin los políticos de turno aún seria peor, solo basta fijarse en los países que la política y políticos es nula allí cada uno puede acampar como quiere, siendo al final todo un caos. Aquí, en lo nuestro, España, con nuestras autonomías que para mi han sido y son un progreso en todos los sentidos, lo único que tendría que hacer el estado es eliminar dobleces en muchas administraciones, son muchos dispendios inútiles que pagamos de más se podría llegar a simplificar para no volver a gestionar lo que la comunidad ya es de su competencia, aunque el estado me parece que no esta por esta labor. En fin procuremos bailar cada uno a su manera pero sin pisarnos siguiendo el compás de la música lo mejor posible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario