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Este es un cuadro que presente en un concurso sobre Tirant lo Blanc en Tarragona, me leí todo el libro, me gusto y de él saque esta pintura que no me premiaron pero fue una forma de leerme el libro de caballerías de Joanot Martorell 1490; pero tuvo comprador, aunque no me acuerdo quien fue el alma caritativa de quedarse con el cuadro, nunca lleve cuenta de los compradores.
El caballista Tirant lo Blanch montado en su corcel blanco con su yelmo medieval, vara y capa adornada con escudos de regiones catalanas. Unas gotas de sangre formando la senyera catalana encuadrada con un escrito donde pone en catalán –Qui bé està que no es moga, qui seu en pla no té d’on caure- Quien bien está que no se mueva, quien se sienta en firme no tiene miedo en caerse, en la base del cuadro están tres doncellas que fue el motivo de las delicias del Libro de Caballerías de Tirant.
¡QUÉ PENA, SOY CATALÁN!
Hago esta exclamación por motivos diferentes, vine al pueblo de Cerve-R.A. por dos motivos, uno era que yo era asmático profundo a consecuencia de unos campamentos de la Falange y las JONS, se entiende, no del campamento, es que por ser más machos hacíamos cosas absurdas, (cumplía 14 años) yo me tiré de cabeza y me bañe en el Pantano de Santa Fe del Monseny (1300 metros altitud) recién salido el Invierno el agua estaba tan helada que al sacar la cabeza fuera del agua ya me faltaba el aire, cogí una pulmonía y me quedaron secuelas, asma permanente hasta el día actual. A consecuencia del asma y de mi profesión en aquellos momentos (23 años Contramaestre de tejidos) encontré trabajo en Cervera como encargado de una fábrica del Juanillo para poner en marcha los telares de tomos para alpargatas, cosa que con penas y alegrías al cabo de un año todo funcionaba. Asma y trabajo fueron dos razones el conocer Cervera del Río Alhama.
El pueblo estaba a una altitud de 550 metros más o menos sobre el nivel del mar, me sentó bien para mis bronquios.
¡Qué pena, soy catalán! En el momento del enamoramiento, de la que sigo enamorado, por parte mía y de la otra parte, ningún problema, por parte de familiares, ya había sus qués y sus cuántos, cuidado… es catalán no es de fiar; con los amigos cerveranos lo compensaba cuando íbamos de ronda siempre pedía un chiquito o un gordo de vino, la respuesta de amigos que me decían siempre era la misma: no pareces catalán, los encargados que hemos tenido hasta ahora en la fábrica catalanes siempre para chiquetear pedían vermut o incluso coñac, serían catalanes con este gusto, ahora, en el 2000 y pico para alternar los cerveranos toman su Marianito un “vermutillo” o cerveza, yo en este sentido no he evolucionado tanto, aun sigo con mis chiquitos de tintorro.
Q pna, soy ctlan!! -en lenguaje chat- igual algún día lo veamos en la RAE como otro idioma nacional. Durante mi vida de joven siempre me acuerdo de los carteles esgrafiados en las paredes de mi pueblo y capitales: SI ERES ESPAÑOL HABLA ESPAÑOL, otros usaban HABLAME EN CRISTIANO, otros más osados, HABLAIS COM PERROS, O COMO POLACOS incluso un día un policía nacional me dio un bofetón en un tranvía por hablar en catalán; el blasfemar era multado el hablar en mi idioma reprimido y sancionado (que conste que mi formación escolar ha sido nacional-católica-facista). En aquellos tiempos a pesar de insultos contra la lengua e incluso con las personas se soportaba por imposición, a nivel político nada de nada, mis sentimientos eran más bien sensuales que de patria, pasaba de todo, pequeñeces acumulativas junto con injusticias dan fruto a los sentidos… uno se va haciendo viejo y los recuerdos reviven en uno, los sentimientos transformados en sexuales se disipan en cambio te llegan otros sentimientos, seguramente más racionales, los de tu propia tierra donde tu naciste, donde comes y vives; me pregunto: ¿esto es bueno o malo sentir tu llamada de tu entorno? No lo sé, sólo sé que mis sentimientos en vista de lo que hay que ver, se van transformando, se acercan cada día más a mi tierra, Cataluña por una parte y Cervera por la otra, la globalizaron está en mi como una nubarrón esperando la lluvia y Europa con preocupación, pero en vista que algún país importante de la Comunidad se quiere largar puedo pensar que igual no sea tan malo no estar en ella, es un divagar por no callar.
En Cervera muchos me preguntan tu eres separatista, yo les contesto como los pimientos, que le gustan a mi mujer (riojana) entreverados, tienen colorido y diferentes tonos. Así soy de pensamiento. Los políticos con sus leyes a conveniencia ver el horizonte es difícil, no da para más, la línea siempre hay alguien que con fuerza la retira y llegar es imposible.
El guerrear no es lo mío. Con la paciencia me alimento, sabiendo que otros nacionalistas carpetovetónicos hacen todo lo posible con leyes refrendadas y amparadas por ellos mismos. Que así sea, ajo y agua.
MI DERECHO
Yo que luche contra lo absurdo,
casi toda la vida
quiero vivir con dignidad
y no encuentro salida.
No busco grandes pasiones,
ni riquezas, ni aventuras;
sólo pido el derecho
de querer y ser querida.
Poesia
de Mª Isabel Jimenez Garraleta
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